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Nº 133 - 26 de abril de 2010

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PULSACIÓN SEMANAL
 
 

Se conmemoró primera clase realizada en 1833
Escuela de Medicina celebra 177 años

  • Festejo estuvo marcado por la solidez y vigencia que le otorgan la reciente reacreditación por el período máximo establecido por CNA-Chile y el orgullo de contar con un cuerpo estudiantil del más alto nivel y el mayor compromiso social.

En el aniversario número 177 de la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile recordó la primera clase que se dictara en 1833 y también ahondó en la labor solidaria de sus estudiantes luego del reciente terremoto, nacida tanto en las capacidades académicas como en el liderazgo y la vocación de servicio de los jóvenes, cualidades patentes desde su ingreso a nuestra institución.


La secretaria docente Lidia Mardones y la doctora María Eugenia Bruzonne recibieron un recuerdo de manos de la directora de la Escuela de Medicina, doctora Christel Hanne (al medio).

El encuentro, que se realizó el viernes 16 de abril de 2010 siendo encabezado por la decana de la Facultad de Medicina, doctora Cecilia Sepúlveda, partió con las palabras de la directora de esta unidad académica, doctora Christel Hanne, quien revisó parte de su historia fundacional, recordando a los primeros profesores quienes iniciaron la enseñanza de la disciplina a 22 alumnos inscritos, de los cuales sólo cuatro recibieron el título casi una década después. Posteriormente, se refirió al gran sentido social de los nuevos estudiantes, el cual se manifestó en los compromisos que hicieron por escrito con su Escuela de Medicina al ingresar, haciendo patentes sus intenciones de esfuerzo y entrega para cumplir con el sueño de estudiar en la Universidad de Chile, con frases como “Me comprometo a esforzarme al máximo para  cumplir mis sueños, a no rendirme frente a la adversidad, a saber que las cosas siempre pueden mejorar. Me comprometo tanto profesional como individualmente a buscar lo mejor para la salud de mi país, de las personas. Incluso no sólo a eso, sino que a todo en lo que pueda ayudar”.


La decana de la Facultad de Medicina, doctora Cecilia Sepúlveda, destacó que lo egresados de nuestra institución se han dedicado a mejorar la calidad de vida y la salud de la población nacional.

Luego, la doctora Patricia Ancic, quien fuera académica de nuestro plantel, dictó la conferencia “Música y Medicina, causas de muerte de los grandes compositores”, basándose en el libro del mismo título, de su autoría, que presentó en la reciente versión de las Semanas Musicales de Frutillar. En su presentación, se refirió a los casos de los compositores Bach, del período Barroco; Beethoven, del Clásico; Chopin, del Romántico, y Gershwin, del Moderno, analizando las penosas circunstancias de sus decesos y refiriéndose a su inextinguible legado artístico, mostrando trozos de sus más afamadas obras.

A continuación, se procedió a premiar a los docentes destacados del año académico 2009, así como a los funcionarios administrativos y los estudiantes de mejores promedios en cada nivel. Además, se despidió a la doctora María Eugenia Bruzzone y a la secretaria de dirección de la Escuela de Medicina Lidia Mardones, quienes se acogieron a retiro.

La generosidad de los jóvenes

Posteriormente, y para dar a conocer su labor de voluntariado en las zonas más afectadas por el terremoto, el interno Pablo Carrasco y el médico Nicolás Silva se refirieron al trabajo que iniciaron a días del sismo en la zona de Llico, realizando catastros de los campamentos establecidos luego de la urgencia, así como prestando atenciones médicas, y al operativo de salud organizado por el Campus Centro de la Facultad de Medicina en Sagrada Familia y Retiro. En sus palabras, reflexionaron acerca de los déficit que presentaba, incluso antes de la catástrofe, la atención que se entrega a los habitantes de estas zonas; los beneficios del enfoque multidisciplinario que se dio a los damnificados –con el apoyo de estudiantes de otras facultades de la Universidad de Chile-, y del respaldo institucional que la Casa de Bello dio a los voluntarios.


El doctor Nicolás Silva dio a conocer la experiencia del voluntariado en la localidad de Llico.

A nombre de los internos de Medicina, el estudiante de sexto año Alberto Aedo analizó los logros alcanzados tanto por su escuela como por la propia facultad, como la renovación de convenios docentes asistenciales, la visita y estadía de alumnos de la Universidad de Harvard, las actividades de investigación de los estudiantes reflejadas en programas como Ayudantes Alumnos y otros encuentros, y los éxitos deportivos.

Por último, la decana de la Facultad de Medicina, doctora Cecilia Sepúlveda, destacó las innumerables generaciones de médicos egresados de nuestra institución que se han dedicado a mejorar la calidad de vida y la salud de la población nacional, señalando que “ése es nuestro compromiso y deber, a eso estamos convocados, para seguir aportando a nuestro país”. Además, relevó el indiscutible liderazgo del plantel en la formación de especialistas, así como la reacreditación de la Escuela de Medicina por el plazo máximo y el reciente nombramiento de Premio Nacional de Medicina, que recayó en el académico de esta facultad, doctor Rodolfo Armas Merino.