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Nº 64 - 12 de septiembre de 2008

Prof. María M. Pavez ingresa
a la Academia Chilena de la Lengua

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Dr. Eduardo Rosselot
Medalla Juvenal Hernández
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Decana Cecilia Sepúlveda,
Premio “Mujer Terra 2008”
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PULSACIÓN SEMANAL
 
 

SeÑala el doctor Miguel O´Ryan:
“Chile tiene que promover el diÁlogo sin desconfianzas y con polÍticas de largo plazo”

  • El trabajo del académico del ICBM, en su calidad de investigador principal de la vacuna contra el rotavirus, es incluido en una publicación del Ministerio de Economía que da cuenta de los casos más exitosos de investigación científica y tecnológica de Chile.

La División de Innovación del Ministerio de Economía ha elaborado un publicación que reúne los “70 casos exitosos de investigación científica y tecnológica” desarrollados en Chile durante los últimos años.


Doctor Miguel O'Ryan

En el libro se incluyen varios proyectos de la Facultad de Medicina de la U. de Chile, entre ellos la generación de la vacuna contra el Rotavirus, en que participó como investigador principal el doctor Miguel O'Ryan, director del Programa de Microbiología y Micología del Instituto de Ciencias Biomédicas (ICBM).

Este estudio, que fue publicado en la revista médica internacional más importante del mundo: The New England Journal of Medicine, dio origen a que otra de las revistas más prestigiosas del área científica internacional, The Lancet, eligiera este artículo como el más importante del año 2006.

Y si bien este estudio clínico, uno de los de mayor envergadura que se ha hecho en el mundo, fue desarrollado con la colaboración de muchos países y diversos especialistas, incluidos profesionales de las universidades de Valparaíso y Concepción, el doctor O'Ryan, en su calidad de investigador principal, estuvo encargado de ayudar a elaborar y diseñar el proyecto, seleccionar los lugares donde se aplicaría el estudio clínico, evaluar la marcha del mismo, colaborar con el análisis de los datos y, posteriormente, con su publicación.

Embajador de la vacuna contra el rotavirus

“Creo que uno de los mayores éxitos de este proyecto fue la excelente coordinación y planificación del equipo que permitió instalar en el mercado mundial una vacuna que, en poco más de un año de uso, ha dispensado alrededor de 20 millones de dosis. Estos resultados ayudan a posicionar a nuestro país globalmente, de manera que otros grupos ya sienten confianza para evaluar en Chile fármacos, vacunas y otros productos que pueden beneficiar a la población mundial”, comenta el médico infectólogo.

El doctor O'Ryan añade que desde el punto de vista clínico y universitario haber participado tan activamente en este proyecto innovador lo satisface y enorgullece porque ha implicado una gran ayuda social para todos los niños del orbe.

“Además, ha sido una gran vitrina para nuestra facultad y universidad. Me siento como un embajador académico y científico de la vacuna, ya que siempre he llevado en alto la bandera del plantel en todos y cada uno de los países del mundo donde me han pedido que exponga sobre el sustento científico del inmunizador”, comenta.

El doctor O'Ryan señala que uno de los temas pendientes que tiene Chile es crear un espacio donde fluya el diálogo constructivo entre los organismos estatales, las entidades privadas y las universidades.

“Hay que eliminar los resquemores y las desconfianzas que empañan los vínculos entre los diversos actores sociales, empresariales, académicos y políticos. Si queremos ser un país desarrollado no cabe duda de que tenemos que trabajar unidos y, lamentablemente, ese es un tema que a mi parecer, falta por desarrollar”, dice.

A modo de ejemplo, el doctor O'Ryan estuvo trabajando por más de un año en el diseño de un proyecto Fondef que tenía como objetivo intervenir en la polución de las costas chilotas, ello para erradicar la contaminación de los moluscos bivalvos que se ven afectados con uno de los virus entéricos emergentes a nivel mundial y que es responsable de producir brotes agudos de diarrea: el norovirus.

A pesar de sus esfuerzos, fue imposible superar las múltiples barreras que surgieron tanto a nivel de los privados como de las autoridades técnicas ministeriales. “La falta de visión es preocupante porque las prioridades parecen centrarse en el corto plazo postergando, por lo tanto, los proyectos de mediano y largo aliento”, puntualiza.

Grupos técnicos potentes y gestión profesional

En cuanto a las políticas de financiamiento destinadas a los investigadores nacionales, el doctor O'Ryan destaca que en los últimos años ha habido un aumento significativo de recursos pero “uno quisiera vislumbrar la presencia de grupos técnicos más potentes que apoyaran la evaluación y el seguimiento de proyectos específicos de manera que hubiese resultados tecnológicos concretos”.

También aboga por una gestión más profesional y por el desarrollo de una autoevaluación constante y profunda, que es tan necesaria para lograr el avance de Chile. “Debemos contar con proyectos de envergadura e innovadores que sobrepasen los intereses de grupos y las coyunturas políticas, para eso se necesita madurez, solidaridad, un cariño desinteresado por el país y una gran visión de futuro”, resalta.

En ese sentido piensa que sería bueno tener un ministerio de la ciencia o, mejor aún, uno o más organismos supragubernamentales conformados por personas de sólido prestigio científico y/o tecnológico, dispuestas a trabajar en forma profesional y a proponer los grandes proyectos nacionales para los próximos 50 años .

“Necesitamos de una visión y diagnóstico integrador para saber en qué gastar los recursos. Por ejemplo, nuestros profesionales van a Australia y Nueva Zelanda a doctorarse, lo que me parece muy bien, pero me pregunto si previamente se planificó las áreas que el país desea potenciar y si ya se ha diseñado un plan para que, una vez que estos jóvenes vuelvan, los podamos instalar adecuadamente en las universidades, el área privada u otras instituciones donde colaboren al desarrollo del país. Ello porque el mercado no lo puede regular todo”, comenta el especialista.

Soluciones a los grandes temas

Las casas de estudio superiores tienen, a juicio del doctor O'Ryan, la labor de participar más activamente en este diálogo abierto y fructífero: “Parte de la misión de nuestro plantel es ofrecer soluciones a los grandes temas de Chile y para eso cuenta con los recursos intelectuales de su comunidad universitaria. Lamentablemente, siento que nos falta insistir más en esta actitud propositiva, sobre todo porque al no hacerlo nos sumamos a la falencia de iniciativas sólidas, lo que no nos deja avanzar hacia el desarrollo”.

Cecilia Coddou