“Los profesores que reconocemos como maestros son aquellos capaces de transformarnos”, fue lo que dijo la doctora Rosa Devés, vicerrectora de Asuntos Académicos, al abrir esta ceremonia. Así definió a quienes tienen la misión de hacer posibles todos los cambios que, en materia de inclusión, equidad y calidad en la educación, está impulsando la Universidad de Chile. De esa manera, recordó a los 600 jóvenes que, hasta ahora, han ingresado a la corporación por la vía del sistema de ingreso prioritario, “lo que nos ha exigido asumir con mayor conciencia nuestra responsabilidad como formadores (…) Este esfuerzo se ha traducido en nuevos centros de enseñanza aprendizaje especializados en acompañar y atender las necesidades de nuestros estudiantes en una relación más estrecha entre el área académica y de calidad de vida; en la creación de una nueva Vicerrectoría de Asuntos Estudiantiles y Comunitarios; en programas de tutorías pares a nivel estudiantil, entre otras. Todas ellas se fundamentan en la construcción de comunidad desde una perspectiva interdisciplinaria en donde cada uno tiene un espacio de derecho y otro de responsabilidad. Nos comprometemos a seguir avanzando en una universidad que conoce mejor a sus alumnos, que los prepara para el destino que ellos, y no nosotros, han elegido”. Finalmente, y dirigiéndose a los homenajeados, agregó que “es necesario aprender en distintos espacios y multiplicar las miradas; por ello los llamamos a ustedes, que han sido distinguidos, a liderar los procesos de transformación que se requieren”.
El rector Vivaldi dijo a los homenajeados que "ustedes contribuyen de manera
sustantiva a la labor docente, a esa función primaria de la transmisión de
la cultura".
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Por su parte, a nombre de los homenajeados el profesor Cristián Guerra, académico del Departamento de Música de la Facultad de Artes, enumeró las que, a su parecer, son tres claves para la alcanzar la excelencia en la enseñanza bajo la forma de destacadas citas, como son “Si quieres aprender, enseña”; “enseñar lo que el estudiante necesita” y “sacar lo mejor del alumno”. Para llegar a esto, agregó que la enseñanza “es un don, un ministerio, un servicio”, y finalizó recordando la importancia de lograr “que el estudiante vibre con la frecuencia que le es propia”.
Transmitiendo cultura
Finalmente, el profesor doctor Ennio Vivaldi, rector de la Universidad de Chile, dijo que “lo que ustedes hacen de manera tan destacada corresponde a una actividad que es una de las que nos definen mejor como seres humanos, como es la transmisión explícita de la cultura. Y quizás en ninguna otra especie el DNA es menos relevante que en esta, en el sentido que la desproporción entre lo que genéticamente uno trae y lo que culturalmente ofrece el mundo es tan grande que hace posible este concepto tan universitario como es reconocer como “padres” o “madres” a los maestros que forman en determinada disciplina, en la entrega de un conocimiento con un respeto por las nuevas generaciones. Ustedes contribuyen de manera sustantiva a la labor docente, a esa función primaria de la transmisión de la cultura, de la reproducción de una sociedad; por eso es que es tan importante el rol que a esta universidad le ha cabido en la historia y por eso que si hay una identidad que nos haga sentir chilenos desde los orígenes de la República y hasta hoy, en buena medida se la debemos a gente que, como ustedes, fue capaz de retransmitir a una generación tras otra valores que los tomaron, impulsaron, transformaron pero continuaron con esta identidad, con esta secuencia, con esta lealtad con nuestra historia”.
Los mejores de Medicina:
Doctora Rosa Devés, vicerrectora de Asuntos Académicos, junto a los
profesores Diego Cifuentes, Claudia Araya, Marcela Correa, Virginia Delfín,
Pamela Soto, Rodrigo Valenzuela y Sandra Araya, junto a la hija de la
doctora Ulrike Kemmerling -en representación- y el rector de la Universidad
de Chile, doctor Ennio Vivaldi.
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Los mejores docentes de pregrado de la Facultad de Medicina este año son los profesores Marcela Correa, de Enfermería; Claudia Araya, de Fonoaudiología; Virginia Delfín, de Kinesiología; Ulrike Kemmerling, de Medicina; Rodrigo Valenzuela, de Nutrición; Pamela Soto, de Obstetricia; Sandra Araya, de Tecnología Médica, y Diego Cifuentes, de Terapia Ocupacional.
Prof. Marcela Correa: “Siento que es un premio que estimula a seguir creciendo y a hacer mi trabajo de la mejor manera, más aún cuando se piensa que está dado por los estudiantes, me siento honrada”.
Prof. Claudia Araya: “Fue un gran honor que nos distinguieran de esta manera, fue una ceremonia muy emocionante y creo que a todos los profesores nos dan más ganas de hacer mejores clases, por ser una guía para los estudiantes, que ellos se vean en nosotros y nosotros en ellos”.
Prof. Virginia Delfín: Me sorprendí mucho con esta distinción, no la había recibido nunca antes, y espero seguir adelante, después de 22 años de academia durante los cuales siempre me he sentido cercana a los estudiantes.
Prof. Rodrigo Valenzuela: Estoy muy contento y no me lo esperaba. Me toca hacer bastante docencia en los primeros años de la carrera y se logra un vínculo sólido con los estudiantes, que a uno lo ven con cercanía y como un ejemplo. Además coordino el Programa de Ayudantes Alumnos en la carrera, lo que me permite estar en contacto directo con los estudiantes a los que los motiva la investigación en el área de Nutrición.
Prof. Pamela Soto: “Son 21 años desde que me titulé, aquí mismo en la Casa Central, y diez años que llevo de docencia, así que es una emoción inmensa. Esta nominación por parte de los estudiantes y de los colegas obedece a que uno entrega la docencia más allá de la instrucción y de las habilidades clínicas; lo hace desde el amor hacia los otros”.
Prof. Sandra Araya: “Estoy muy contenta con este premio, en especial porque reconoce la labor docente; este año me tocó un curso complejo que se tornó en un desafío, por lo que es aún más grato lograr esta distinción, que la recibo por primera vez”.
Prof. Diego Cifuentes: “Siento un gran orgullo, de verme tan joven entre académicos con tanta experiencia, escuchar al rector y al profesor Guerra, las cuales me hicieron verle otro significado a este premio. No me lo esperaba, yo soy bien cercano con los alumnos, pero trato de ir reconociendo mis falencias para ir mejorando”. |
