La iniciativa tuvo lugar el 6 de mayo de 2014, ocasión en que la doctora Sepúlveda dijo que “por el bien de la calidad de la salud que le otorgamos a todos los chilenos y chilenas debemos resguardar que las carreras del área médica se dicten solo en universidades. Cada una de ellas tiene un determinado ámbito disciplinar que exige una profunda formación básica y general, científica y reflexiva, características que son impartidas sólo en este ámbito”.
El profesor Mario Herrera, director de la Escuela de Kinesiología, y la
doctora Cecilia Sepúlveda, decana de la Facultad de Medicina, en la marcha.
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La marcha se fraguó como respuesta a la decisión de la Cámara de Diputados que el 22 de abril de 2014 votó porque sólo las carreras de Enfermería y Obstetricia tuvieran estatus universitario, dejando fuera de esta condición a Kinesiología, Fonoaudiología, Tecnología Médica, Terapia Ocupacional y Nutrición y Dietética. “Esta situación debe revertirse, no es posible separar a estas carreras, dejándolas en primera y segunda categoría. Se trata de profesionales que integran los equipos de salud que trabajan en conjunto en la atención de las personas”, indicó la decana Sepúlveda.
La determinación de la Cámara de Diputados debe ser refrendada por el Senado, instancia que otorga –explica la doctora Sepúlveda– oportunidad de revertir la situación. Con ese fin, el 5 de mayo de 2014 se llevó a cabo una reunión entre la ministra de Salud, doctora Helia Molina, la decana de la Facultad de Medicina y directores de las escuelas de pregrado del plantel, de manera de concitar el apoyo de la representante de la cartera gubernamental. En la oportunidad, la doctora Sepúlveda expresó que “la doctora Helia Molina coincide totalmente con nuestro planteamiento y argumentos, en relación a que todas las carreras del área médica deben ser de formación universitaria obligatoria, por el bien de la calidad de la salud de la población chilena”.
Kinesiólogos preparan sus argumentos
Por su parte, el director de la Escuela de Kinesiología de la Facultad de Medicina, profesor Mario Herrera, convocó a académicos y centros de estudiantes de la disciplina pertenecientes a universidades de todo el país, para analizar la actual situación y decidir un plan de acción para revertir esta decisión parlamentaria.
Este encuentro se realizó el 30 de abril de 2014, al cual acudieron docentes y alumnos de diferentes planteles nacionales, tales como las universidades de Valparaíso, Concepción, Católica del Norte, Metropolitana de Ciencias de la Educación, del Desarrollo, Autónoma, Finis Terrae y otras, y en la oportunidad “aunamos fuerzas en torno al Colegio de Kinesiólogos, como representante de nuestra disciplina frente al poder legislativo, pero desde una postura más proactiva y propositiva desde la academia, solicitando informes de avance a nuestro gremio y preparando reuniones con diferentes actores relevantes en el tema, como la que tuvimos con la ministra de Salud, doctora Helia Molina, el pasado 5 de mayo”.
Según explica el profesor Herrera, los argumentos que presentarán para solventar su petición respecto de la formación universitaria obligatoria para los kinesiólogos apuntan al reconocimiento histórico, pues es una disciplina que nació en la Universidad de Chile. Asimismo, que el grado académico de licenciado se puede alcanzar sólo en el marco de una formación universitaria; este grado, según establece la World Confederation for Physical Therapy –entidad que agrupa a los kinesiólogos en todo el mundo-, es indispensable para ingresar al colegio de la orden, así como para continuar con estudios conducentes a especialización o de postgrado. “Por otra parte, el conocimiento disciplinar se ha ido complejizando, así como ha cambiado el paradigma de la salud, desde una perspectiva paternalista, a una en la que la población está empoderada respecto de su salud, para lo que se requiere de profesionales capacitados, que sepan tomar decisiones y adaptarse a situaciones cambiantes, cualidades que dan el conocimiento, las competencias y la habilitación en campos clínicos reales de alta exigencia, como los de las universidades”.
A ello, añadió que otro argumento insoslayable es que el Código Sanitario vigente señala, en su capítulo quinto, establece que los profesionales de la salud deberán ser poseedores de títulos otorgados por la Universidad de Chile o universidades reconocidas por el Estado, lo cual se refrenda en el artículo 1082 del Reglamento Sanitario, especificando este requisito para los profesionales kinesiólogos.
Finalmente, resaltó la unión con la que, como carreras de pregrado de la Facultad de Medicina, seguirán luchando con el fin de lograr este reconocimiento, el cual será votado en la Comisión de Educación del Senado el próximo 14 de mayo y, en caso de ser denegada la decisión de la Cámara de Diputados, pasará a Comisión Mixta para su evaluación.
Cecilia Valenzuela |
