Así lo explicó la directora del Centro de Medicina Reproductiva y Desarrollo Integral del Adolescente, doctora Adela Montero, quien refirió que ambos avances responden a necesidades concretas del equipo multidisciplinario de salud, tanto en cuanto a la atención de pacientes como en la docencia directa.
Doctoras Paulina Troncoso, Cecilia Sepúlveda y Adela Montero en el corte de
cinta inaugural del ecotomógrafo.
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Y es que, añadió, la sala espejo permitirá que, al momento de realizar intervenciones en el ámbito de salud mental a adolescentes, docentes y estudiantes puedan permanecer en el recinto contiguo y observar el desarrollo de la entrevista, sin perturbar la intimidad que requiere el paciente ni la confidencialidad en que deben ofrecerse estas terapias. Asimismo, el ecotomógrafo es parte del control ginecológico de rutina, por lo que su adquisición permitirá mantener estos estándares sanitarios.
“En estos últimos tres años nuestro equipo multidisciplinario altamente especializado –con cinco especialistas en ginecología pediátrica y de la adolescencia, un siquiatra infantil y de la adolescencia, un médico especialista en adolescencia, dos matronas, una asistente social y dos sicólogas infanto juveniles- ofreció 8.400 atenciones de salud a las y los adolescentes, procedentes de diferentes comunas de la Región Metropolitana y de otras regiones de nuestro país. Esta es una tendencia creciente que atribuimos a un aumento en la consulta espontánea de los jóvenes, a la mayor derivación desde otros profesionales e instituciones; al seguimiento personalizado de menores de 15 años y a la confirmación telefónica de los ingresos a salud mental, así también como la mejor oferta de tecnología anticonceptiva que ha sido garantizada mediante la distribución a través de la coordinación con el Servicio de Salud Metropolitano Norte y con la empresa farmacéutica”.
Ecotomógrafo Doppler Color. |
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Finalmente agradeció el apoyo, la motivación y activa participación de diferentes unidades y profesionales de la Facultad de Medicina para la concreción de estos avances, así como a las doctoras Vania Martínez –por su respaldo en la implementación de la sala espejo- y Paulina Troncoso, por su trabajo para la adquisición del ecotomógrafo doppler color.
Apoyo a la atención clínica, la docencia y la investigación
Por su parte, la doctora Martínez, siquiatra infanto juvenil, dijo que “en salud mental tenemos la particularidad que la docencia clínica que hacemos se nos ve complejizada, porque se requiere un espacio de intimidad con los pacientes que no se logra si es que atendemos en cada oportunidad con personas diferentes a nuestro lado; por eso que anhelábamos tener esta sala espejo, para ofrecer ese espacio de intimidad al paciente y, a la vez, hacer docencia clínica y que los estudiantes puedan ver estas intervenciones”.
A su vez, la doctora Troncoso, ginecóloga pediátrica y de la adolescencia, dijo que su labor como equipo multidisciplinario “se trata de otorgar una atención de calidad que sea un modelo a replicar para quienes están en formación y también que seamos capaces de reconocer las necesidades particulares de nuestras adolescentes, de manera de darles la mejor respuesta”. A ello, añadió que a partir del trabajo asistencial han surgido líneas de investigación, “con las cuales pretendemos aportar al conocimiento y mejores prácticas en cuanto a la labor clínica”. En ese tenor, la adquisición del ecotomógrafo doppler color “complementará la evaluación diagnóstica y terapéutica de las pacientes, apoyará nuestra labor docente y nuestras investigaciones”.
Sala espejo para atención en salud mental. |
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Por último, la decana de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, doctora Cecilia Sepúlveda, celebró la implementación de los avances descritos, “porque son elementos muy necesarios para el trabajo con adolescentes y niños, en un ambiente de confidencialidad y seguridad, en áreas tan sensibles como la salud mental”. Además, dijo que esta es una oportunidad para felicitar y agradecer todo el trabajo que hace Cemera; “anualmente en Chile, alrededor de 30.000 recién nacidos son hijos de madres adolescentes, y un porcentaje importante de esas jóvenes se atiende aquí, donde se les brinda una cobertura integral, que les permite no sólo concluir exitosamente su gestación y parto, sino que también seguir estudiando y adquirir competencias y habilidades para la vida”.
Cecilia Valenzuela León
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