Rector propuso instalar en el país una nueva Iniciativa Bicentenario destinada a la educación
Universidad de Chile premia a sus mejores académicos e investigadores

• Durante la realización de la inauguración del año académico 2013, el profesor Víctor Pérez destacó a quienes hicieron un excepcional aporte a la generación y difusión del conocimiento durante el 2012.

De esta manera, el 23 de abril de 2013 se premió a académicos de toda la Universidad de Chile en las categorías de primer lugar en los Concursos Fondecyt Regular 2013; de Iniciación 2012 y de Postdoctorado 2013. Además, a quienes lideran los proyectos financiados por el Concurso Anillos; a los investigadores (as) y grupos que publicaron sus trabajos como autor correspondiente, en revistas internacionales ISI-WOS ubicadas en el 10% superior de sus respectivas disciplinas y a los que se destacaron en cuanto a creación, extensión y publicaciones de libros.

Algunos de los académicos premiados junto al rector de la Universidad de Chile, profesor Víctor Pérez.

Los académicos de la Facultad de Medicina que recibieron este homenaje frente a las más altas autoridades institucionales, entre los que se contaban la decana de nuestro plantel, doctora Cecilia Sepúlveda, fueron 25, los que representan a sus respectivos equipos de trabajo, integrados por investigadores y estudiantes de pre y postgrado. Asimismo, fueron distinguidos dos médicos del Hospital Clínico de la Universidad de Chile. 

Nuevo modelo educacional

Luego de esta premiación, el rector de la Casa de Bello, profesor Víctor Pérez, instó a terminar con el modelo educacional privatizador y mercantil impuesto por la dictadura y propuso instalar en el país una nueva Iniciativa Bicentenario destinada a la educación.

Así, en su discurso de inauguración del año académico 2013, planteó  implementar en cinco facultades de educación en el país –al menos tres de las cuales deberían pertenecer a instituciones públicas- la capacidad de transformarse, con 500 millones de dólares y a lo largo de una década, en centros de reconocida excelencia internacional en la formación de profesores y en investigación en el área.

“Estas cinco facultades de educación se deberían comprometer a sostener proyectos que impliquen, a lo menos, inversiones en infraestructura, equipamientos y laboratorios de última generación; concursos internacionales para traer al menos 200 académicos con doctorado en el próximo quinquenio; alianzas con instituciones similares del más alto nivel mundial; una red de establecimientos escolares y jardines infantiles, con asiento en sectores sociales vulnerables, y la creación de centros de experimentación didáctica y de plataformas web, para que todos los educadores del país accedan a los desarrollos logrados. Todo lo anterior, necesariamente acompañado de políticas públicas que eleven la valoración social y material del ejercicio de la profesión docente”, sostuvo.

“Cambios gatopardistas”

El rector repasó las acciones implementadas en educación en los últimos años, que calificó de “parches y retazos, sin hilo conductos aparente, cambios que han surgido más como resultado de las negociaciones para superar conflictos sociales coyunturales y a espaldas de la ciudadanía, que como resultado de una política pública de Estado”.

“Un ejemplo de cambio gatopardista es el actual proyecto de Superintendencia de Educación Superior, entidad que solo la U. de Chile defendió en junio en 2011, contra la oposición y descalificaciones de muchos quienes hoy aparecen como sus grandes impulsores y defensores. Es un proyecto deficiente y que, lejos de desterrar el lucro en la educación superior, pretende legalizarlo por la vía de regular las relaciones entre empresas relacionadas y las universidades”, expresó.