Portada
 
Nº 177 - 16 de mayo de 2011

“El Colegio Médico no es un partido político”
Leer más..

Inauguración de edificio de
cuatro plantas
para los niños de Chile
Leer más..

“Todas las madres y sus recién nacidos deben tener las mismas garantías”
Leer más..

PULSACIÓN SEMANAL

 

El Pulso
 © Todos los derechos reservados
Quiénes somos

“Lo que hoy corresponde es dialogar y aportar”, añade.
“El Colegio Médico no es un partido político”

  • La  gestión del doctor Pablo Rodríguez como presidente de esta entidad se ha sustentado en la búsqueda de soluciones que permitan mejorar las condiciones de salud de la población y las condiciones de trabajo de los médicos.

Doctor Pablo Rodríguez

La recuperación de la tuición ética es una demanda que permite fortalecer el desarrollo y dignificación de la profesión. Así lo cree el doctor Pablo Rodríguez, actual presidente del Colegio Médico de Chile y candidato a la reelección para un segundo período, entre el 2011 y el 2014. Retomar esta facultad permitirá a la orden un efectivo control sobre el ejercicio profesional de sus asociados y velar por el prestigio de la disciplina a través de los tribunales de ética pertenecientes a la institución. Pero, además, asegurar que las personas puedan recurrir a instancias juridiccionales apropiadas cuando consideren que su derecho a una atención adecuada ha sido vulnerado, “hecho que consideramos de la mayor importancia, ya que será un eficiente mecanismo de control social”, señala el doctor Rodríguez.

El dirigente sostiene además que, en el caso de colegas que se aparten de la ética en el desarrollo de sus labores, los tribunales serán absolutamente estrictos e imparciales, “porque no es posible que, por ejemplo, si una minoría de médicos ha hecho uso ilícito de la licencia médica, nos dañen a todos. Esa gente tiene dos posibilidades: o trabaja apegada a las normas éticas o tendrán que enfrentar las consecuencias, las que podrían llegar a una suspensión transitoria o definitiva del ejercicio profesional”.

Pero mirando aún más allá, el doctor Rodríguez añade que “nuestro compromiso es relevar el tema de la ética en el trabajo y quehacer cotidiano de los médicos, no solamente en la deontología del ejercicio profesional, sino que también en la preparación de los nuevos profesionales, lo cual es responsabilidad de todos los actores que participan en este proceso”. Por lo mismo, remata señalando que “con la Facultad de Medicina hemos trabajado en forma conjunta diversos temas y regulaciones para mejorar la calidad de la educación médica en el país, como son la acreditación de campos clínicos, la formación de especialistas para cubrir la actual brecha existente, el EUNACOM y otros”.

Mejorar las coberturas

Bajo la misma óptica del aporte social que la orden ha desarrollado, el doctor Rodríguez ahonda en lo que fue la elaboración del Segundo Nomenclador de prestaciones de salud 2011, el que permite actualizar las prestaciones de acuerdo a la realidad actual de la acción médica, documento que fue entregado recientemente a Fonasa.

Este estudio se realizó en conjunto con 52 sociedades científicas que reúnen a todas las especialidades médicas reconocidas en el país, y detectó la existencia de 1.097 problemas de salud sin cobertura en el seguro estatal ni en el sistema privado, lo cual significa que el 24% de las prestaciones médicas vigentes en el país no tienen bonificación para los 12 millones de usuarios del sistema Fonasa y casi tres millones de beneficiarios de las Isapres.

Al respecto, el doctor Rodríguez dice que “actualmente, en este escenario existen dos vías para resolver una prestación no codificada: o el médico usa un código que no corresponde a la prestación, generando caminos alternativos que después se nos critican, o los pacientes deben cancelar de manera particular la atención. Este, sin duda, es un tema exclusivamente económico, ya que cuando  hemos reclamado a Fonasa, siempre se nos responden que el Ministerio de Hacienda no les autoriza expansiones presupuestarias y, por lo tanto, se ven en la obligación de elegir sólo algunas nuevas codificaciones, de manera que no se incremente el presupuesto más allá de un 5%. Pero nosotros no podemos aceptar que por un tema económico y no sanitario, se limite el acceso de la población a la atención en salud y a la ciencia médica”.

Intereses ajenos a la profesión y al gremio

Esta influencia de ámbitos diferentes a lo propiamente médico, añade, los afecta cada vez más: “Hoy, nuestra profesión se ve enfrentada a una lucha de intereses  ajenos a la medicina que a veces nos dificultan el andar. Esta situación se ha dado en los últimos años, como por ejemplo en lo que se refiere a las licencia médica, donde se ha desplegado una campaña comunicacional para restringir su otorgamiento”.

¿Esa lucha de intereses se manifiesta incluso al interior de la propia orden?

En eso he sido claro y categórico: he centrado este liderazgo en los temas propios de los médicos. Aquí hay gente que me ha planteado que políticamente habría que ser más duro –o más blando- con el gobierno, ante lo que he declarado que el Colegio Médico es una entidad que tiene que representar a todos los médicos, de manera autónoma e independiente, velando por el desarrollo de la profesión, por adecuadas condiciones de trabajo que redunden en una mejora de las condiciones de salud de la gente. Por mantener esta posición a uno lo estigmatizan; yo provengo del mundo progresista y me defino como una persona capaz de sentarse a la mesa, dialogar y llegar a acuerdo, y si esos caminos se cierran entonces habrá que confrontarse, pero en torno a los temas de la salud, y no centrarse en los contenidos programáticos y las estrategias de los partidos políticos, porque este no es un partido político ni puede serlo. No somos ni de gobierno ni de oposición. No podemos seguir haciéndole daño al país, en el sentido de continuar con la confrontación no constructiva, y eso es lo que yo he tratado de hacer; tenemos que ser capaces de decir que vamos a plantear con firmeza nuestra posición, pero primero vamos a agotar las posibilidades de diálogo y de entendimiento porque es lo que corresponde hacer.

Por otra parte, finaliza, “nuestro trabajo se ha centrado en tener un colegio que sea pluralista, amplio y participativo. Pero, sobre todo, en desideologizar muchas materias técnicas que a veces son llevadas a confrontaciones políticas que responden a otro tipo de intereses. La dirección actual de nuestra entidad ha privilegiado lo gremial, por lo que hemos sido capaces de elaborar un conjunto de propuestas en forma colectiva que nos han permitido avanzar”.

Cecilia Valenzuela