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Nº 163 - 16 de diciembre de 2010

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Y se realizó en el sistema público
Primer bypass intra-intracraneano en Chile

  • Luego de 18 horas de cirugía, este puente injertado de arteria submilimétrica salvó la vida de un paciente con una bomba de tiempo en su cabeza: un aneurisma cerebral.

Doctor Jorge Mura

La exitosa intervención, efectuada a fines de noviembre pasado en el Instituto de Neurocirugía, estuvo a cargo del doctor Jorge Mura, profesor asistente del Departamento de Ciencias Neurológicas Oriente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, quien explica que esta es la primera vez que se realiza esta técnica en el país pues “es extremadamente difícil, ya que no sólo se debe disecar un aneurisma y hacer un puente que desvíe la sangre en la arteria afectada, sino que, por su ubicación, no se puede hacer otro tipo de tratamiento o corrección quirúrgica, y por el diámetro submilimétrico de las arterias involucradas, requiere de una gran experiencia en la técnica”.

Cosiendo lo casi invisible

El doctor Mura explica que los aneurismas son dilataciones arteriales circunscritas que se producen por debilidad de su pared, de manera que se inflan como un pequeño globo, con el riesgo de que revienten o sangren. Los tratamientos habituales son mediante una intervención que inserta un clip metálico que cierra el aneurisma o su “relleno” mediante la inserción de un catéter endovascular, lo que podría ser a través de una pierna, por ejemplo.

“Pero existen casos en que ninguna de esas dos posibilidades es viable, debido a que el flujo de sangre a través de las arterias está incluido en el problema, de modo que ahí es cuando es necesario hacer bypass cerebrales”, añade el doctor Mura.

La gran mayoría de las veces los bypass son extra intra craneales; es decir, con una arteria de fuera de la zona afectada, “generalmente la llamada “temporal superficial”, -que es la que uno siente en las sienes cuando duele la cabeza-, se lleva desde fuera del canal sangre hacia adentro, resecando primero la que tiene el aneurisma”, explica.


En rojo está marcada la arteria que se quedó como bypass.

Pero en el caso de los bypass intra intra craneales, se usa un trocito de la misma arteria temporal superficial y se pone en la arteria con aneurisma, haciendo un desvío que rodea la zona afectada, que antes se ha resecado con dos clip metálico.

Las mayores dificultades que hay que enfrentar, asegura, son la ubicación de estos aneurismas, a veces entre los lóbulos cerebrales del paciente, como es el caso de este primer bypass intra-intra. Otra, que el diámetro de estas arterias es submilimétrico: en este caso, medía 0,91 milímetros –lo que medirían nueve cabellos juntos-, lo que explica que solamente en la sutura vascular se haya demorado 100 minutos, de una operación total de 18 horas.


Esta es la imagen esquematizada del bypass intra intra craneano.

El paciente afectado, informa el doctor, era un hombre joven de Talca que consultaba por una persistente cefalea. “Un scanner reveló una imagen redondeada entre el lóbulo temporal y parietal; luego, una angiografía tridimensional mostró que era un aneurisma no susceptible de tratamiento habitual. Dado que habían tres arterias comprometidas, en una se hizo un bypass extra-intra craneano, y en otro uno intra-intra”. El enfermo evolucionó muy favorablemente, quedó sin secuelas y ya se encuentra en su casa.

La voz de la experiencia

¿Cómo se llega a poder suturar algo tan pequeño? Con muchísima práctica: el doctor Mura lleva, en una década de experiencia, intervenciones en 720 aneurismas cerebrales, y 39 casos de bypass en los últimos cinco años, y éste es el primero de las características descritas. Luego, añade, con el apoyo de lo que es la alianza docente asistencial entre el Instituto de Neurocirugía y la Universidad de Chile, lo que permite contar con neurocirujanos que han llegado a la subespecialización debido a la cantidad de casos que pueden resolver en el recinto y al conocimiento generado entre los académicos del Departamento de Ciencias Neurológicas, que trasmiten a nuevas generaciones de becados y fellows.

Esta técnica de sutura vascular, finaliza el doctor Mura, “si bien no se aplica en todos los casos de aneurisma, es importante que los neurocirujanos sean capaces de reparar una arteria en el caso de una lesión, y la única manera de hacerlo es manejando la sutura vascular, y para eso hay que tener la experiencia y el aprendizaje de un equipo de especialistas”.   

Cecilia Valenzuela