“Durante una cirugía los ginecólogos no deben actuar con temor, sino con mucho respeto. Por eso es fundamental que tengan conocimientos acabados de anatomía”, señala el doctor Clemente Arab, académico de la Facultad de Medicina de la U. de Chile y especialista de la Unidad de Oncología Ginecológica del Hospital Luis Tisné.
El médico, junto a los doctores Margarita Biotti, Jorge Zúñiga y el académico Miguel Soto, pusieron en marcha el curso “Anatomía en Ginecología”, que culminará el 23 de noviembre, al que están asistiendo médicos que cursan la especialidad de Ginecología y Obstetricia en la Escuela de Postgrado de la U. de Chile.
Desde hace tres años están llevando a cabo esta actividad formativa que en un comienzo se impartió sólo a alumnos de la Sede Occidente, lugar donde se gestó la iniciativa, y que ahora está abarcando a profesionales de los campus Centro, Oriente, Sur y Occidente. “Las encuestas que hemos aplicado a los jóvenes nos indican que estos cursos han sido un éxito porque mejoran sus habilidades y competencias en cirugía ginecológica, les dan más seguridad e, incluso, incrementan sus destrezas quirúrgicas”, plantea el doctor Arab.
El médico señala que sin el apoyo del director del Departamento de Ginecología y Obstetricia Occidente, doctor Miguel Puxant, habría sido imposible iniciar este curso. De igual manera, la participación de los doctores Biotti y Eduardo Herane, los únicos ginecólogos anatomistas de Chile, ha sido prioritaria para llevar a cabo la actividad de postítulo. “Es un privilegio trabajar con tantas personas talentosas que pertenecen a distintas áreas y campus de nuestra facultad y que se han unido con mucho entusiasmo a este desafío, cuyo objetivo no es otro que el de perfeccionar la formación de las nuevas generaciones”, añade el doctor Arab.
Los académicos Jorge Zúñiga, Miguel Soto y Clemente Arab. |
Justamente, el profesor Miguel Soto destaca que una de las características del trabajo universitario es que ofrece la oportunidad de formar equipos multidisciplinarios. “En nuestro caso el Instituto de Anatomía y todo su material se ponen al servicio de la clínica para impartir una educación más completa a los residentes. Así, a pesar de ser un curso muy complejo, el balance ha resultado positivo y los becados lo consideran una gran oportunidad para mejorar sus habilidades”, plantea el académico del ICBM.
No hay que olvidar que con el advenimiento de la cirugía laparoscópica se hace aún más necesario el sustrato anatómico, añade el doctor Arab. “En general todos los jefes de servicio y departamento han manifestado una excelente recepción al curso, el próximo año esperamos que sea parte del currículum obligatorio de formación de los especialistas en esta área”, resalta.
El profesor Miguel Soto agrega que en el futuro esperan incorporar al curso disección quirúrgica en cadáveres frescos e imagenología.
Cecilia Coddou
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