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Nº 130 - 5 de abril de 2010

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U. de Chile estudiará un pueblo extinto: los chonos
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PULSACIÓN SEMANAL
 
 

Con financiamiento de un proyecto Fondecyt Regular
U. de Chile estudiará un pueblo extinto: los chonos

  • Analizarán el DNA mitocondrial y reevaluarán la data antropológica de sus restos para determinar si fueron una entidad poblacional específica o más bien el resultado de la expansión tardía de huilliches sobre el territorio Kawésqar.

Habitaron las costas sureñas de Chile en la época prehispánica, eran nómades del mar y se dedicaban, principalmente, a la casa del lobo marino, la pesca y recolección de moluscos. Incluso, hay un grupo de islas que lleva su nombre: Archipiélago de los Chonos. Sin embargo, poco se sabe de este pueblo ya extinto, incluso, algunos postulan que nunca fueron una entidad poblacional específica, sino más bien el resultado de la expansión tardía de las poblaciones agroalfareras Huilliche de la Isla de Chiloé sobre las poblaciones Kawésqar.


Doctor Mauricio Moraga

Un grupo de científicos, encabezados por el académico del Programa de Genética Humana del Instituto de Ciencias Biomédicas de la U. de Chile, doctor Mauricio Moraga, investigará este tema en el marco de un Proyecto Fondecyt Regular denominado “Estudio de DNA mitocondrial de los habitantes del extremo septentrional de los canales patagónicos: una aproximación al mundo chono desde la antropología molecular y la reevaluación de la data antropológica  y arqueológica”.

El doctor Moraga, quien tiene una línea de trabajo centrada en analizar la genética de las poblaciones humanas tanto vivas como extintas, explica que este estudio, que se extenderá por tres años, se realizará empleando material óseo almacenado en la Facultad de Ciencias Sociales de la U. de Chile y en algunos museos del sur del país.

“Sobre los chonos se sabe poco ya que habitaron una zona muy compleja en términos geográficos y su desarrollo cultural no dejó, como otros grupos prehispánicos, cerámicas o productos textiles que sirvieran como fuente de información para arqueólogos y antropólogos. Más bien sus costumbres se conocen por las descripciones subjetivas que hicieron de ellos los cronistas de la época, antes de que se extinguieran hacia fines del siglo XVIII”, señala.

De ahí que sea tan importante recabar datos a partir del legado óseo: “Con los recursos del Fondecyt los antropólogos físicos podrán aplicar técnicas modernas para realizar múltiples determinaciones antropométricas y de morfometría geométrica, lo que nos ayudará a caracterizar este grupo humano respecto a su estatura, estado nutricional, morfología craneana y enfermedades”, dice.

El legado óseo

Asimismo, el doctor Moraga extraerá y amplificará DNA mitocondrial de los huesos (que informa sobre el linaje materno) el cual servirá para estudiar las posibles vinculaciones entre los Chonos y las poblaciones instaladas al norte del Archipiélago que lleva su nombre, donde se ubican los Huilliche de Chiloé, y quienes están al sur de este conjunto de islas, donde históricamente se ubicaron los Kawésqar.

“Desde el punto de vista mitocondrial vamos a ver si los chonos son una población distinta a las otras y analizaremos el posible flujo génico entre los grupos estudiados. Para ello no sólo trabajaremos con muestras óseas que tienen cientos o miles de años, también recolectaremos material genético de los últimos sobrevivientes de las poblaciones kawésqar”, explica el doctor Moraga.

El Fondecyt contempla, asimismo, una excavación arqueológica en la Isla Traiguén que se llevará a cabo con la metodología actual, lo que ayudará a relacionar los esqueletos con su contexto. “Si todo resulta según lo esperado, este proyecto nos ayudará a caracterizar a los chonos, conocer la estructura de su población, reconstruir su historia y promover la identidad cultural de los descendientes de los pueblos nómades canoeros mediante un soporte biológico, algo que tiene muy entusiasmados particularmente a los miembros de la comunidad kawésqar”, agrega.

Finalmente, el doctor Moraga acota: “Muchos de estos grupos siguen desplazándose en los canales del sur y producto de la ocurrencia de flujo génico con inmigrantes recientes van perdiendo sus características fenotípicas así como su identidad cultural. De ahí que sea tan importante el trabajo mancomunado a nivel molecular, arqueológico y antropológico”, acota.

Cecilia Coddou