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Nº 128 - 22 de marzo de 2010

Ellos son la verdadera Universidad de Chile
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Inspección técnica de las dependencias de la Facultad de Medicina
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Realizan estudio interdisciplinario de  somnolencia y mal dormir en altura
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PULSACIÓN SEMANAL
 
 

Son tres las misiones: reconstrucción, atención en salud y entretención
Los corazones azules reparten esperanza

  • Con el fin de reclutar manos y voluntades en la Facultad de Medicina, la Dirección de Asuntos Estudiantiles, en conjunto con el Consejo de Estudiantes de la Salud, CES, dieron la bienvenida a todo el alumnado del plantel, en la inauguración de la Semana de la Solidaridad y Responsabilidad Social Universitaria realizada el 15 de marzo de 2010.

En la oportunidad, la doctora Marisol Prado –titular de la DAE- y el presidente de la agrupación estudiantil, Santiago Mora, agradecieron a los jóvenes presentes su interés en participar de las actividades que están organizadas en favor de los damnificados por el reciente terremoto, las cuales les dieron a conocer a través de las vocerías de sus distintos representantes.


Santiago Mora, presidente del CES, motivó a los estudiantes de todas las carreras a ayudar a los damnificados por el terremoto.

En primer lugar, el profesor Sergio Garrido, de la Unidad de Deportes, se refirió a las zonas de seguridad y vías de escape del Campus Norte de la institución, información que, añadió, será nuevamente entregada el lunes 22 de marzo de 2010, al iniciar el año académico.

Luego, Santiago Mora se refirió a las labores de voluntariado que están asumiendo los estudiantes de las distintas facultades de la Casa de Bello, tanto en sus respectivas disciplinas como colaborando en la remoción de escombros, la reconstrucción de viviendas y en el centro de acopio de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, FECH. Asimismo, recomendó tranquilidad a sus compañeros durante las posibles réplicas que puedan sucederse, dadas las buenas condiciones en las que quedó el edificio luego del sismo.


La doctora Marisol Prado, directora de Asuntos Estudiantiles, dijo que “tenemos que enfrentar el trabajo que queda por hacer en el mediano y largo plazo, y reflexionar acerca de cómo estamos preparados para asumir estos retos, si somos capaces como universidad de dar respuesta al país”.

Posteriormente, la doctora Prado reconoció la labor que académicos, funcionarios y estudiantes han estado haciendo en Lolol, Llico y Parral –además de Cañete, Tirúa, Peleco y Arauco, poblados también apadrinados por la Fech- desde que se produjo el desastre natural, “en un gesto que los enaltece y con lo que hemos demostrado que los jóvenes tienen un corazón gigante lleno de espíritu solidario”. Ahora, añadió, “tenemos que enfrentar el trabajo que queda por hacer en el mediano y largo plazo, y reflexionar acerca de cómo estamos preparados para asumir estos retos, si somos capaces como universidad de dar respuesta al país”. Dicho esto, dio el pase a los voceros de los distintos equipos, cuya labor está enfocada en tres frentes: reconstrucción, atención en salud y entretención para los niños. 

De esta manera, representantes de los grupos “Newen” –organización de voluntariado social en salud, que en esta contingencia está trabajando en la zona de Alhué-; del conjunto de estudiantes de Terapia Ocupacional que está cooperando en Cumpeo y de “Magia por una sonrisa”, quienes invitaron a los presentes a elegir alguna de las alternativas de voluntariado expuestas en los formularios.

Los que quieran ayudar y los que necesiten ayuda

Para analizar las posibles fórmulas de asistencia que sean aplicables en cada caso, la doctora Marisol Prado llamó a los alumnos que hayan sufrido pérdidas en materia habitacional u otras a acercarse al Bienestar Estudiantil o a la secretaría del CES, entidades encargadas de catastrar esa información y estudiar las posibles ayudas para aliviar dichas situaciones.

Además, informó que durante los próximos días se convocará a académicos, funcionarios y estudiantes que podrían colaborar prestando alojamiento a los alumnos que se hayan visto afectados por el sismo.

 

Aquiles y su pala

Pidió permiso para ausentarse de sus funciones como administrativo en la Escuela de Obstetricia y Puericultura, cogió su mochila, carpa y una pala y partió con un grupo de voluntarios a Chanco. Es Juan Aquiles Silva, sólo “Aquiles” para los amigos, y “siempre me ha gustado ayudar”, dice, así que la convocatoria a apoyar a los damnificados le vino como anillo al dedo. “En mi casa no pasó nada aparte del susto, gracias a Dios, y ya que estoy acostumbrado a acampar no es problema para mí, por eso es que decidí unirme a los chiquillos que van a trabajar”, explica. Durante una semana estará removiendo escombros y colaborando en lo que se pueda, con la misma alegría con la que hace sus funciones diarias.

Cecilia Valenzuela