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Nº 127 - 12 de marzo de 2010

Escuela de Salud Pública liderará iniciativas en salud mental tras el terremoto
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Escucharon y ayudaron
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Rector inspecciona estado de Facultad de Medicina
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PULSACIÓN SEMANAL

elpulso@med.uchile.cl

Nuestros pilares están incólumes


Decana Dra. Cecilia Sepúlveda

He querido hacer uso de este medio para compartir con la comunidad algunas reflexiones en torno a las consecuencias del terremoto que sacudió a gran parte del país el pasado 27 de febrero.

Vaya en primer lugar nuestro sentimiento de solidaridad y apoyo a todos quienes en diversos grados se han visto afectados por esta catástrofe. Compartimos el dolor de los cientos de familias que han visto cómo de un momento a otro sus vidas han cambiado tan radicalmente. Muy especialmente queremos hacer sentir nuestra compañía a los integrantes de nuestra comunidad que directa o indirectamente han sufrido en estos días.

Desde la responsabilidad que nos cabe al frente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, hemos hecho todo los esfuerzos a nuestro alcance para acudir en ayuda de quienes hoy lo necesitan. Así, hemos mantenido contacto permanente con el Ministerio de Salud y sus servicios, alertas a todos los requerimientos de la eventualidad. La dura contingencia con que nos hemos encontrado al volver a nuestras actividades ha provocado en toda nuestra comunidad diversas muestras del espíritu que nos mueve. Hemos procurado canalizarlas de tal modo que respondiendo a nuestro carácter de institución pública al servicio de los intereses y necesidades del país, pongamos al servicio de Chile todas nuestras capacidades para superar las consecuencias del terremoto.

He comprobado en terreno el sinnúmero de iniciativas solidarias para ir en ayuda de los afectados, muchas de ellas de carácter espontáneo que demuestran el temple de quienes componen esta comunidad. Estudiantes, académicos y personal de colaboración se han organizado para que los deseos de ayudar se transformaran en acciones concretas destinadas a solucionar los problemas más urgentes de los afectados a lo largo del país.

Quiero felicitar y sobre todo agradecer a todos los que han cooperado de una u otra forma en la mitigación del dolor: a los estudiantes voluntarios, a los académicos y académicas que se han desplazado a las zonas críticas de la catástrofe, al personal de colaboración que se ha organizado para aportar su ayuda y trabajo, a nuestros internos y académicos, que en los diversos campos clínicos sin dudarlo se han sumado a los turnos que los servicios han implementado por la emergencia; en fin, a todos y todas los que hacen de ésta una Facultad especial, una casa donde se acoge el talento y la capacidad y  donde se cultiva la solidaridad y el espíritu de servicio.

A sólo horas del terremoto que afectó a nuestro país, la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile se movilizó para contactar a sus miembros y también para evaluar los daños ocurridos. La oportuna respuesta que tuvieron tanto los funcionarios, directivos y académicos durante y después del terremoto en todas las unidades que componen nuestro plantel, evitó que los desperfectos causaran daños mayores. Reciban pues nuestro agradecimiento y felicitación todos los miembros de esta comunidad que inmediatamente ocurrido el sismo ya estaban trabajando para evaluar los daños de sus respectivas unidades.

Afortunadamente, nuestra infraestructura tiene la nobleza propia de las construcciones hechas para durar y, en general, los efectos del terremoto han sido de carácter menor. Para tranquilidad de todos, hemos instruido la revisión de nuestros edificios por parte de un equipo de ingenieros estructurales cuyo informe conoceremos en estos días.

Finalmente, como es de conocimiento público, las réplicas del terremoto se seguirán sintiendo con mayor o menor intensidad por algún tiempo. Es por ello que hacemos un llamado a la comunidad para mantener la calma en estas situaciones y atender las instrucciones de los encargados de piso o los directivos de cada unidad, a fin de afrontar la situación sin correr riesgos innecesarios.

Reciban todas y todos un saludo cordial,

Dra. Cecilia Sepúlveda
Decana