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Nº 108 - 15 de septiembre de 2009

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PULSACIÓN SEMANAL
 
 

Director del HCUCH recibe
Medalla Juvenal HernÁndez

  • “Continuaré trabajando con el mismo tesón, voluntad y esfuerzo hasta el último día de permanencia en la Universidad y en este Hospital Clínico”. Con estas palabras recibió la condecoración universitaria el Director General del Hospital Clínico Universidad de Chile, Dr. José Amat Vidal.

Como un “alto honor” calificó el director general del Hospital Clínico Universidad de Chile, Prof, Dr. José Amat, su distinción con la Medalla Rector Juvenal Hernández Jaque, en la mención de Ciencia y Tecnología: “Lo asumo como un reconocimiento a la lealtad y al trabajo de toda una vida dedicada a la Universidad de Chile. Lo siento también como una distinción a mi querido Hospital Clínico. Agradezco a la Facultad de Medicina por haber propuesto mi nombre”, comentó el académico.


Dr. Amat y su familia en la entrega de la Medalla Juvenal Hernández.

El reconocimiento lo recibió de manos del Rector (s) Dr. Jorge Las Heras, quien lo definió como “un hombre de un extraordinario temple y un compromiso enorme, de una ética impecable y, por sobre todas las cosas, con una gran capacidad y humildad para aceptar todas las labores que se le entregan”.

La distinción es un premio a la fidelidad de este médico cirujano formado en la Universidad de Chile, vinculado desde muy temprano a la ella a través de la actividad académica en la Facultad de Medicina y por su labor médico-asistencial en el Hospital Clínico. Fue a su querido hospital y a quienes trabajan en él que dedicó este reconocimiento.

“Esta medalla la recibo con humildad y la dedico a todos los académicos y funcionarios que trabajan en el Hospital, no sólo en la atención de pacientes, sino también en docencia e investigación”, dijo Amat.

Su vínculo con el hospital podría remontarse incluso varios años antes de su época universitaria. Fue el propio médico quien reveló parte de esa historia.

“Recuerdo cuando niño, caminando de la mano de mi abuela por avenida La Paz, un primero de noviembre, después de haber visitado a nuestros deudos en el Cementerio General, le pregunté por una estructura de hormigón y fierros oxidados. Ella me explicó que se trataba del nuevo hospital San Vicente de Paul, inconcluso en ese momento, probablemente por falta de recursos. Ese edificio permaneció así durante una década y fue el primer contacto que tuve con el hospital”, afirmó la autoridad, rememorando la raíz de su vínculo con el centro académico y asistencial.


Vicerrector de Asuntos Académicos de la Universidad de Chile, profesor Iñigo Díaz; medalla Rector Juvenal Hernández Jaque, doctor Eduardo Rosselot; decana de la Facultad de Medicina, doctora Cecilia Sepúlveda, y el decano de la Facultad de Derecho, profesor Luis Ortiz Quiroga.

Respondiendo a un llamado del Rector Víctor Pérez hace dos años, el doctor Amat salió de su “protegido pabellón de operaciones” para entrar de lleno a la gestión clínica y liderar un hospital “con dinámica de cambio, ágil y expedito”, aunque resguardando su “tradición de excelencia y de formador”.

Era la oportunidad para “corregir rumbos” que no podía perder, recordó Amat. Para ello formó un equipo médico administrativo cohesionado, con académicos y profesionales de primer nivel.

Hoy el Hospital Clínico vive una etapa de transformaciones y adecuaciones al nuevo escenario del que hizo mención el doctor Amat al recibir la Medalla Rector Juvenal Hernández. Un escenario que exige competitividad, modernidad, calidad y calidez. Es un hospital amable, cercano, con profesionales de excelencia y con la tecnología puesta al servicio de sus pacientes. Es la tarea que se impuso y el compromiso al que pretende ser fiel hasta el término de su administración.
 
“Continuaré trabajando con el mismo tesón, voluntad y esfuerzo hasta el último día de permanencia en la Universidad y en este Hospital Clínico”, dijo el doctor al finalizar su discurso. Sus últimas y sentidas palabras fueron para sus padres, por todo “lo que se sacrificaron para que pudiera estudiar y ser médico”, y para su casa formadora, por permitirle ser “un universitario de la Chile”.

Comunicaciones HCUCH