T.O. Paula Soto |
La inesperada situación generada por la renuncia de la directora anterior culminó con el apoyo mayoritario del claustro recibido por la TO Paula Soto el pasado 4 de septiembre de 2009. A días de asumir este enorme desafío, la flamante directora afirma que la motivación está en creer las condiciones propias para llevar a cabo el proyecto de la escuela: “Desde hace años, pensábamos que era un cargo que valía la pena que desempeñáramos todos, pues ayuda al desarrollo de distintas destrezas y habilidades en términos de administración académica, aparte de todo el trabajo y responsabilidades que implica. No hay que temerle, hay que venir con hartas energías y con ganas de proponer cosas que uno se ha imaginado para esta escuela”.
Por ello, añade, está feliz con la ayuda que diferentes autoridades de la institución le han ofrecido ante este nuevo desafío: “y la voy a aceptar toda, porque es la única forma de hacerlo bien y aprender”.
Las vallas cercanas
Entre los primeros retos que deberá sortear, se encuentra el proceso de reacreditación de su escuela, para el cual el cuerpo académico ya tiene listo el informe de autoevaluación y a punto de ser enviado a la Comisión Nacional de Acreditación. “Estábamos esperando que asumiera, para mandarlo con la firma de la nueva dirección, de manera que sea la misma que reciba a los pares evaluadores externos, que creemos vendrán antes de fin de año”, explica la profesora Soto.
Entre las fortalezas que destaca de este informe, están la consistencia del plan formativo –“pues, aunque aún no se refleja la propuesta del nuevo currículo, están todas las evaluaciones que hemos hecho para identificar los puntos que hay que reforzar y, además, hace años que trabajamos en lo que es integración curricular”-, el aumento del claustro docente mediante nuevas contrataciones, las mejoras en infraestructura y la adquisición de un número importante de títulos que están en Biblioteca Central a disposición de sus estudiantes.
Además, en el seguimiento a los egresados –área que se ha mostrado clave en los procesos de reacreditación de otras escuelas- la académica explica que “tenemos una coordinación de comunicación y extensión, que nació con la construcción de una base de datos bien completa de todos nuestros egresados con los cuales tenemos un vínculo regular. Asimismo, a través de la coordinación de campos clínicos, tratamos de hacer una sincronía de varias acciones: por ejemplo, permite que se realicen proyectos de investigación en conjunto entre sus profesionales y nuestros académicos, o que organicemos cursos de postítulo. Pero, además, que estrechemos lazos con ellos, que son potenciales empleadores; esto, en la riqueza que contamos con campos clínicos no sólo hospitales sino que también organismos educacionales y gubernamentales de diferentes áreas: tenemos estudiantes en CONACE, FONADIS, Gendarmería de Chile; son instituciones nacionales que desarrollan objetivos estratégicos dentro de lo que son las políticas públicas”.
...y las lejanas
Una vez finalizada la reacreditación, la profesora Soto espera que se aboquen por entero al proceso de Innovación Curricular. “Toda esta etapa de cambios afecta justamente a los grandes proyectos, porque se necesita la conducción de una dirección apropiada para responder a todo lo que implica en términos administrativos y presupuestarios.
¿Cuáles son sus proyectos como directora, qué esperas o sueña?
El proceso de desarrollo académico. La nueva propuesta de reglamento de carrera académica para toda la Universidad de Chile, junto a la de nuestra facultad respecto de los recursos humanos, son desafíos que tenemos muchas ganas de enfrentarlos como equipo, apoyándonos mutuamente. Pienso que el desarrollo académico de cada uno de los miembros de la escuela tiene que ser en forma sincrónica con nuestro PDI. Apoyar a los están más cerca de avanzar en la carrera, para luego contar con su respaldo. Vamos a generar esa dinámica.
Eso difícil en esta disciplina, donde no hay tanta oferta de postgrados...
Pero es un desafío. El 2010 deberíamos comenzar a impartir nuestro magíster y, además, estamos trabajando en el diseñar y generar otros programas. Y me encantaría alcanzar a explorar las necesidades y requerimientos que podría tener un programa de doctorado en nuestra disciplina.
Cecilia Valenzuela
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