Para ellos, el desafío era mayúsculo, pues no sólo representaba las dificultades que supone recibir cientos de trabajos científicos para seleccionar “sólo” a 430; invitar a los mejores especialistas para dictar las conferencias en torno al tema convocante, la medicina de urgencia; recibir a centenares de representantes de 19 universidades nacionales y una extranjera, y conseguir el auspicio de publicaciones internacionales como el British Medical Journal y The New England Journal of Medicine, entre otras miles de actividades. Aprovecharon esta oportunidad para volver a sus orígenes, y dejar de ser sociedad para retomar el nombre fundacional de Academia Científica de Estudiantes de Medicina, ACEM, creado hace 25 años y modificado cuando hubo que retomar fuerzas y posicionamiento.
La doctora Cecilia Sepúlveda recordó los principios de pluralismo y tolerancia que caracterizan a la Universidad de Chile. |
Así que la Asociación Nacional de Academias Científicas de Estudiantes de Medicina de Chile, ANACEM, tuvo razones de sobra para sentir orgullo de la labor realizada por una de sus agrupaciones acreditadas. A partir del lema “Medicina de urgencia, acude al llamado”, el congreso constó del concurso de los trabajos seleccionados; el Primer Encuentro Nacional de Revistas Científicas de Estudiantes de Medicina, así como un curso ad hoc; clases magistrales referidas al tema; un módulo de tres clases de Medicina Interna, impartido por miembros del capítulo chileno del American College of Physicians, cuya gobernadora es la doctora María Eugenia Pinto; y, además, actividades recreativas y de esparcimiento, como visitas a museo y fiestas.
El presidente de ANACEM Chile, Francisco Garrido. |
Los ritos, los logros, las metas
Durante el acto inaugural Dino Sepúlveda, director del Primer Encuentro de Revistas y editor en jefe de la Revista Chilena de Estudiantes de Medicina, publicación de nuestro plantel, abordó desde “Tres modelos de rito” –así tituló su intervención- la historia de los congresos nacionales que los convocan, la de ANACEM y la de ACEM. De esta forma, recordó el primer encuentro realizado durante 1978 en Valparaíso; la generación de la instancia nacional en 1994, “que quebró el modelo relacional que teníamos, para establecer otro que nos agrupó más allá de nuestras propias universidades”, y la labor que los reunió periódicamente y motivó siempre para hacer realidad estas jornadas.
 |
Posteriormente Carlo Pezo, presidente del XXXII Congreso de CCNEM, rememoró los inicios del trabajo como sociedad, “intentando despertar lo que era una academia dormida y sin presencia nacional, organizando jornadas y cursos, retomando la edición de la revista; ordenando la casa, al fin, con el irrestricto apoyo de autoridades de la facultad y la Escuela de Medicina”. Asimismo, se mostró orgulloso del sistema de evaluación de los trabajos implementado para este concurso, con modelo de doble ciego y pautas avaladas y reconocidas metodológicamente por la Escuela de Salud Pública de nuestra institución. Luego, el presidente de ANACEM y estudiante de la Universidad Austral , Francisco Garrido, se refirió a la importancia de “desarrollar el conocimiento, cultivando el potencial humano y tecnológico que en la patria puede generarse para ser, realmente, una nación independiente y acorde con los nuevos tiempos” . Por ello, y para revertir la escasez de médicos investigadores, señaló que los esfuerzos deben provenir tanto de entidades gubernamentales y el sector privado, como de las facultades de medicina –“mediante una fuerte formación en bases clínicas, metodología de la investigación, epidemiología, bioestadística y bioética, en un proceso eminentemente práctico”-, y de los propios profesionales médicos, “quienes pueden transformar el problema del paciente en una pregunta de investigación que puede ser resuelta a través de la investigación básica, clínica o epidemiológica”.
 |
Cerró la jornada inaugural la doctora Cecilia Sepúlveda, decana de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, quien reflexionó respecto de las bases de pluralismo y tolerancia que rigen a la corporación. “Las vivimos como algo implícito en nuestro ser institucional (...) Vivimos también –y nuestros estudiantes lo saben muy bien- la cultura de la calidad y la exigencia académica como un bien por el cual muchas veces hay que sacrificar mucho. Particularmente en nuestra profesión el margen de error es mínimo y, por ello, todo el empeño y dedicación que durante su vida estudiantil sean capaces de imprimir a su labor, tendrá consecuencias patentes en su futuro”.
 |
Por último, y abordando el tema central del congreso, dijo que “la medicina de urgencia, así como la atención primaria, requiere de miradas de futuro cuyo horizonte se centre en la solución creativa a los problemas que los servicios presentan en la actualidad y cuyo impacto se siente con fuerza en las personas más necesitadas. Confío en que los estudiantes de medicina del país sean capaces de aportar a la construcción de políticas públicas para el mejoramiento de la salud de nuestra población”.
Cecilia Valenzuela
