Pasado, presente y futuro de la disciplina se dieron cita en la ceremonia de certificación anual de los diplomas en Bioética Clínica y en Ética de la Investigación Biomédica , que imparte y organiza el Departamento de Bioética y Humanidades Médicas de la Facultad de Medicina, encuentro que se realizó el 28 de mayo de 2009.
La profesora Ana Escribar; los doctores Mireya Bravo, Alejandro Afani,
Sergio Valenzuela y la profesora Nina Horwitz. |
Y es que el director de la unidad, doctor Sergio Valenzuela, hizo una completa revisión de los avances disciplinares acaecidos desde que se inició su enseñanza en nuestro plantel. Por ejemplo, en cuanto al pregrado, explicó que esperan profundizar y sistematizar la experiencia actual de docencia a los 1.400 estudiantes de medicina, mediante un proyecto Mecesup ya presentado, del cual esperan obtener los fondos para lograr una renovación curricular de la enseñanza de la bioética en este nivel, asegurando la excelencia, generando investigación y mejorando la contribución a los campos clínicos. En el postgrado, además de los diplomas convocantes, resaltó el programa de Magíster, que imparten en colaboración con la Facultad de Filosofía, así como dos cursos semestrales, realizados como aporte formativo a la nuestra comunidad académica. Por otra parte, dio a conocer el trabajo en cuanto a la generación e implementación de un código de ética institucional , en conjunto con las escuelas de pregrado del plantel, con las cuales ya se ha avanzado en la fase de desarrollo conceptual del tema, se han consultado expertos nacionales y extranjeros, se realizó una consulta por medio de grupos focales y “en agosto daremos inicio a la etapa de construcción colectiva y de implementación de este código en la facultad”. Por último, se refirió a los avances en nuevas iniciativas, como los “Diálogos entre Derecho y Medicina”. Todo este relato, dijo, tiene como fin seducir a los nuevos 24 diplomados, “para que realmente ejerzan lo estudiado, integrándose a los comités de ética asistenciales, ayudando a tomar decisiones a colegas, pacientes o gestores de instituciones de salud o acercándose a la docencia”.
Una de las diplomadas es la doctora Adela Montero, directora del Cemera, quien recibió su certificado de manos del doctor Sergio Valenzuela. |
Bioética como puente
Posteriormente, la profesora emérita de la Universidad de Chile Ana Escríbar, académica de la Facultad de Filosofía y Humanidades, dictó la conferencia “La bioética como puente entre las humanidades y las ciencias biológicas: lo que recibe y lo que aporta”. En ella, señaló a esta disciplina como la forma en que sus valores ayudan al ser humano a superar la dificultad para prever las consecuencias de su acción técnica –mucho más lenta que el desarrollo de su capacidad para manipular la materia, las fuentes energéticas y la vida-, dicotomía que la lleva a situaciones de decisiones críticas en cuanto a problemas morales. Por ello, la bioética pone en contacto estos niveles, aplicando a las ciencias y las técnicas biológicas los valores investigados y desarrollados por las humanidades y por la ética filosófica.
Por último, se hizo entrega de los certificados a los profesionales, 16 en el diploma de Bioética Clínica y ocho en el de Ética de la Investigación Biomédica.
Cecilia Valenzuela
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