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Nº 87 - 13 de abril de 2009

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PULSACIÓN SEMANAL
 
 

Profesionales indispensables en la correcta detecciÓn y evaluaciÓn del Alzheimer
Chile tiene dÉficit de neuropsicÓlogos clÍnicos

  • En medio de las carencias nacionales, académicos de la Universidad de Chile presentan un tratado que reúne a destacados especialistas latinoamericanos que se han dedicado a estudiar la relación que existe entre cerebro, conducta y cognición.

“La neuropsicología clínica es irreemplazable, por ello, a pesar de que hoy tenemos muchos avances en genética, biología molecular, farmacoterapia e imagenología, cuando se trata de hacer un manejo integral de las enfermedades del sistema nervioso central (SNC) necesitamos de esta disciplina que funciona en base a papel y lápiz”, recalca el doctor Patricio Fuentes, académico de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile.


Doctor Patricio Fuentes.

La neuropsicología estudia la relación entre el cerebro, la conducta y la cognición. Nació, precisamente, como una especialidad creada por investigadores de diferentes áreas que estaban interesados en otorgar una mejor atención a los pacientes que habían sufrido cambios químicos o estructurales en sus cerebros a causa de accidentes o enfermedades. “Estas personas pueden tener disfunciones en el aprendizaje, lenguaje, memoria, organización, planificación, toma de decisiones, comportamiento y en el funcionamiento emocional”, recalca el neurólogo, quien es uno de los editores del Tratado de Neuropsicología Clínica publicado por la editorial argentina Akadia.

El libro, de 678 páginas, reúne artículos de destacados investigadores, médicos, psicólogos y fonoaudiólogos latinoamericanos. De hecho, es el primer tratado con estas características que se produce en la región y que será presentado el miércoles 15 de abril, a las 12.00 horas, en el Salón Lorenzo Sazie de la Facultad de Medicina de la U. de Chile (Avenida Independencia Nº 1027).

“Es un material de conocimiento e información que aúna los datos más actualizados sobre las herramientas neuropsicológicas hoy disponibles. Por eso, a mi entender, es un libro valioso y original que ayudará a quienes trabajan en este campo, ya que no sólo se centra en el diagnóstico, sino también en la evolución de los tratamientos”, recalca el especialista.

En tanto, la académica de la Facultad de Medicina de la U. de Chile, doctora Andrea Slachevsky, co-editora de la publicación junto a los profesores argentinos Facundo Manes y Edith Labos, destaca que, lamentablemente, el país no cuenta con suficientes profesionales formados en neuropsicología clínica. “A nivel mundial, esta disciplina ha cobrado cada vez más importancia por su relevancia asistencial y, sin embargo, Chile se está quedando atrás”, apunta.

Añade que actualmente la única capacitación sobre esta disciplina en la que convergen psicología y neurología es un diploma impartido en Santiago en forma conjunta por las universidades de Chile y Pontificia Universidad Católica. “La neuropsicología requiere de una fundamentación teórica y de un entrenamiento muy meticuloso porque sigue siendo la herramienta primordial para el diagnóstico adecuado de muchas enfermedades, incluido el Alzheimer”, señala la doctora Slachevsky.


Doctora Andrea Slachevsky.

La evaluación que se merecen los chilenos

La neuróloga plantea que el profesional encargado tanto del diagnóstico como de la rehabilitación tiene que saber escoger los tests adecuados según las características de los pacientes. “Vale decir, el neuropsicólogo tendrá que saber qué test aplicar y cómo interpretarlo, porque muchas veces de eso dependerá que la persona tenga un tratamiento precoz y apropiado. Es, por lo tanto, una gran responsabilidad y no puede caer en manos de alguien que no está debidamente entrenado”, dice.

El doctor Fuentes añade que en enfermedades como el Alzheimer esto es muy relevante porque permite tomar medidas farmacológicas y no farmacológicas que tienen un fuerte impacto en la calidad de vida del paciente y su entorno familiar. “Cuanto más temprana es la detección, mejor podrá el enfermo planificar su futuro teniendo aún discernimiento, lo que permitirá, asimismo, controlar las conductas de riesgo. Por ejemplo, dejando de manejar o tomando los resguardos financieros que sean necesarios”, sostiene.

Por eso, comenta el médico de la U. de Chile, el Estado debiera favorecer la formación del recurso humano necesario en neuropsicología para terminar con el subdiagnóstico o mal diagnóstico de algunas patologías. “Recordemos que en la encuesta nacional de salud aplicada el año 2003 se detectó que el 15% de los mayores de 60 años tenían deterioro cognitivo de distinta envergadura. Creo que estas personas merecen una valoración neuropsicológica formal de calidad”, acota.

Cecilia Coddou