En el marco del Día Internacional para la Reducción de Desastres, celebrado el 13 de octubre recién pasado, la Escuela de Salud Pública dio a conocer un documento con lineamientos y propuestas para enfrentar desastres –de origen natural y humano- en el país. La publicación “Recomendaciones técnicas para una política pública en gestión integral del riesgo y manejo de crisis, en el contexto de la emergencia y desastres”, fue escrito por los profesores Alberto Maturana y Adrián Torres, ambos de la división de Políticas y Gestión de Salud de la ESP.
Claudio Arias, exalumno del Diploma en Gestión Integral del Riesgo y encargado de seguridad de la ANFP, comentarista del documento; Dr. Oscar Arteaga, director de la Escuela de Salud Pública; Dr. Alberto Maturana, académico de la ESP y autor del texto; y Álvaro Torres, sociólogo y comentarista de la publicación. |
El documento recoge las principales opiniones y conceptos vertidos por los más de 700 participantes en dos seminarios sobre el tema, organizados por la escuela el año 2010, luego del terremoto del 27 de febrero. En esa oportunidad, expertos de distintas disciplinas, autoridades, líderes de opinión, representantes gremiales y gestores locales debatieron sobre las fortalezas y debilidades que quedaron en evidencia tras el sismo y maremoto.
Tanto en dichos encuentros como en encuestas realizadas con posterioridad, los asistentes coincidieron en destacar el valor histórico del terremoto y la importancia de sacar lecciones de esa experiencia. Asimismo, fue valorada la resiliencia individual y social de los chilenos y el despliegue solidario que se observó en todos los niveles.
Entre los aspectos negativos se menciona el rol de los medios de comunicación, los que, a juicio de los encuestados, no contribuyeron a dar tranquilidad a la población ni a la superación de la crisis social. Asimismo, se criticó la falta de un énfasis en lo preventivo en el país, que vaya más allá del manejo de situaciones puntuales, así como la falta de voluntad política en este sentido. A juicio de las personas consultadas, los mayores déficits se manifestaron a raíz del tsunami, quedando en evidencia la falta de conocimiento, de normas y de capacidad de reacción.
Hacia una política pública
En el ámbito de las propuestas, el mayor consenso se dio en torno a la necesidad de contar con una política pública sobre emergencias y desastres que defina funciones y responsabilidades, que sea prioridad nacional, que enfatice la educación de la ciudadanía y que dé espacio a la toma de decisiones en el nivel local. La existencia de planes reguladores de construcción y de gestión urbana, normas para hospitales seguros, fiscalización efectiva y legislación para la gestión territorial del borde costero, fueron también aspectos destacados.
El documento “Recomendaciones técnicas para una política pública en gestión integral del riesgo y manejo de crisis, en el contexto de la emergencia y desastres” está siendo distribuido a los tomadores de decisiones y estudiosos del tema en todo el país. Una versión electrónica se encuentra disponible en www.saludpublica.uchile.cl/publicaciones.
Daniela Araneda
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