Dr. Juan Carlos Molina |
El Tribunal Constitucional (TC) cuestionó recientemente y a través de un fallo, el actual sistema de fijación de precio de los planes de salud establecidos por las Isapres, ello por considerarlo discriminatorio. Es así como la tabla de factores de riesgo planteada en base al sexo y edad de los usuarios debiera modificarse a través del envío, por parte del ejecutivo, de un proyecto de ley que realice las modificaciones pertinentes.
Esta noticia fue recibida con esperanza y beneplácito por parte de los beneficiarios del sistema, particularmente los adultos mayores que han sido castigados con planes costosos al alcanzar los 65 años de edad. “Habíamos observado este flagelo con bastante pasividad y la verdad es que cuando escuché a un representante de las Isapres diciendo en una radio que por culpa de las personas mayores los jóvenes y niños tendrían que pagar más dinero, lo injusto del comentario me llegó al fondo del alma”, señala el doctor Juan Carlos Molina, académico de la Facultad de Medicina de la U. de Chile y presidente de la Sociedad de Geriatría y Gerontología de Chile.
Hasta ese momento no se había convocado a las sociedades científicas para referirse al particular y por ello consultó a sus colegas la pertinencia de presentar un escrito al respecto. Así, acompañado por el doctor Juan Eduardo Sánchez, expusieron ante el TC los conceptos principales que avalan la no discriminación por edad.
“Fue como dar un examen de grado, reconozco que se me secó la boca porque estábamos en un ambiente tan ajeno al nuestro, donde primaban los profesores de derecho constitucional y abogados de Isapres”, explica el doctor Molina.
Con voz firme y clara el geriatra explicó que la salud del adulto mayor no tiene que ver con los años sino con los daños. “Cuando nos enteramos del fallo nos llenamos de alegría porque se estaba sentando jurisprudencia en un tema que se centra en el respeto y los valores. A veces los sueños se cumplen, por eso no hay que abandonarlos”, recalca.
Chile carece de una política de salud
De hecho, la sociedad fue invitada a presentar sus puntos de vista en una comisión transversal de la Cámara de Diputados que está abordando en profundidad el tema del adulto mayor. Junto al doctor Víctor Hugo Carrasco, también académico de la U. de Chile y secretario de la Sociedad de Geriatría y Gerontología de Chile, resaltó que el país carece de una política de salud orientada a este grupo etario. Las interrogantes fueron tantas que la entidad convocó a los médicos a participar en una segunda sesión con el propósito de que aportaran sus conocimientos a los proyectos de ley destinados a la tercera edad.
“Nos sentimos muy satisfechos porque creemos que estamos generando un cambio que debiera ir en beneficio de las futuras generaciones. Ahora bien, el problema no es sólo legislativo, tenemos que lograr que la sociedad tome conciencia sobre la necesidad de cuidar su salud desde el comienzo de la vida. Asimismo, estamos llamados a aumentar el número de profesionales, de todos los ámbitos, con formación y especialización en el adulto mayor”, recalca.
Poner el tema en la agenda nacional es, a juicio del doctor Molina, una prioridad que va cobrando vida, sobre todo si se considera que las estimaciones indican que el año 2023 el país tendrá igual número de niños que de adultos mayores.
“Hay mucho que hacer: evitar que la publicidad denigre a la tercera edad, promover el envejecimiento activo, fiscalizar a las instituciones que supuestamente están cuidando y protegiendo a quienes permanecen postrados o han sido abandonados, formar cuidadores que posean las herramientas necesarias para darle una buena calidad de vida al adulto mayor, enseñar en las universidades los temas relacionados con el envejecimiento biológico y patológico y empoderar a las personas mayores para que participen activamente en todos los ámbitos, de tal manera que sean tratados con dignidad, respeto y sin discriminación”, acota.
Cecilia Coddou |
