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Nº 137 - 27 de mayo de 2010

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PULSACIÓN SEMANAL
 
 

Luego de las reparaciones que tuvieran lugar debido al terremoto.
Biblioteca Central luce remozado zócalo

  • El espacio fue visitado por las máximas autoridades del plantel el 20 de mayo de 2010, oportunidad en la que el director Económico y de Gestión Institucional, señor Carlos Lazcano, reconoció la celeridad con que se realizaron las obras de reparación.

La autoridad administrativa señaló que se programaron los trabajos para los fines de semana para no interrumpir las actividades que allí realizan los estudiantes. En su presentación ilustró detalladamente el daño que tuvieron paredes y columnas y en una presentación fotográfica dio cuenta del estado en que quedó este sector de la Biblioteca Central, los trabajos realizados y el resultado final.


La decana de la Facultad de Medicina, doctora Cecilia Sepúlveda; el director Económico y de Gestión Institucional, Carlos Lazcano, y la directora de la Biblioteca Central, Carmen Loewenstein, revisan el estado final de las reparaciones en Biblioteca Central.

Luego, la directora de esta unidad, Carmen Loewenstein, manifestó su agradecimiento “por la prioridad que dieron a la Biblioteca Central dentro de las diferentes reparaciones que se deben hacer en la Facultad de Medicina”, añadiendo que aún queda trabajo por hacer para recuperar totalmente la operatividad del servicio que se presta al estudiantado y al cuerpo académico, como es recuperar las salas de Hemeroteca, cuyas estanterías no se han podido poner en pie porque sus daños son irreparables.

Finalmente, la decana de nuestra institución, doctora Cecilia Sepúlveda, se alegró de ver las obras de infraestructura terminadas, “porque de verdad fue muy impresionante ver, al día siguiente del terremoto, el daño que se produjo tanto en este edificio, tan simbólico, como en su patrimonio”. A ello, agregó se le dio prioridad a su reparación “por el insustituible servicio que presta a estudiantes, académicos y funcionarios”, y que ahora el desafío es recuperar el material bibliográfico y las estanterías perdidas.

Cecilia Valenzuela