Dra. Lorena Binfa. |
El 21 de diciembre del año 2009 Lorena Binfa, subdirectora de la Escuela de Obstetricia y Puericultura de la U. de Chile, rindió exitosamente su examen de grado en el Instituto Karolinska de Suecia, hecho que le permitió pasar a la historia como la primera matrona chilena que ha obtenido un doctorado en uno de los organismos de investigación más importantes del mundo.
La Dra. Binfa había culminado su magíster en Salud Pública con mención en Epidemiología en la Escuela de Salud Pública (ESP) de la U. de Chile el año 1996, tras lo cual decidió continuar con su formación. “Cuando viajamos a Suecia en 1999 con el fin de conocer el programa de matronas del Instituto Karolinska, con el que posteriormente la escuela estableció un convenio, tuve la oportunidad de interiorizarme sobre sus doctorados. Fue impresionante porque gran parte de los estudios mundiales sobre calidad de vida en la transición menopáusica, tema sobre el que versó mi tesis y que ha sido mi línea de investigación, se habían realizado en esa entidad”, comenta.
Así que al volver a Chile decidió elaborar un proyecto para ser aceptada en esta universidad y, finalmente, el 2004 quedó registrada como estudiante del Doctorado en Salud Pública de la División de Medicina Social. “Para mi sorpresa, y lo digo con mucho orgullo, me convalidaron varios de los cursos que había realizado en la ESP, lo que me permitió avanzar en lo teórico. Eso demuestra el reconocimiento internacional de nuestro plantel”, señala.
El programa le exigía publicar cuatro artículos pero la Dra. Binfa decidió incorporar una quinta investigación: “Quería saber cómo pueden los docentes entregar a las nuevas generaciones aquellas herramientas que necesitarán para abordar a las mujeres que están viviendo esta etapa de sus vidas y que tienen problemáticas particulares. Por lo tanto, mi interés era hacer un aporte a la academia, a la formación de las matronas”, apunta.
Para eso utilizó una combinación de metodologías cuantitativas y cualitativas en el que participaron usuarias, profesionales que se desempeñaban en Atención Primaria y estudiantes de la carrera que cursaban cuarto y quinto año. “Los resultados fueron muy sorprendentes e interesantes. De hecho, la información obtenida fue útil e incorporada a los cambios curriculares que estamos implementando en la escuela y que fortalecen la orientación psicosocial de la carrera”.
En el Instituto Karolinska, en tanto, valoraron particularmente el estudio porque Chile es uno de los pocos países latinoamericanos donde las matronas atienden a la mujer no sólo en su etapa reproductiva. “En consecuencia, puede ser muy útil si se quiere replicar nuestra experiencia en el resto del continente”, comenta la Dra. Binfa.
Magíster en carpeta
La matrona manifiesta su gratitud a la U. de Chile y al Instituto Karolinska que le permitieron llevar a cabo el doctorado. “Agradezco a las autoridades del plantel y de la escuela, así como a mis colegas que con gran generosidad me suplieron mientras estuve fuera. También a mi familia que me alentó en todo momento”.
En cuanto al futuro, el gran desafío, dice la Dra. Binfa, será potenciar la investigación entre las matronas. “En nuestra facultad esperamos desarrollar algunos proyectos con planteles internacionales, en la perspectiva de generar un programa de magíster orientado a matronas que debería comenzar a impartirse el próximo año. Esperamos que ese sea el puntapié para que aumente el número de profesionales con grado académico que desarrolle investigación, haciendo que las matronas tengamos mayor visibilidad y aportemos al crecimiento de nuestro campo”.
Cecilia Coddou |
