Así lo dio a conocer la profesora Ana María Amaro, subdirectora de Extensión del Instituto de Ciencias Biomédicas del plantel, agregando que “ésta es una contribución de nuestra institución a disminuir la brecha de inequidad que perjudica a la educación pública”.
Esto, pues los Cursos Bicentenario –iniciativa de las vicerrectorías de Investigación y Desarrollo y de Extensión de la Universidad de Chile, a las cuales adhirieron todas las facultades de la corporación- fueron creados para facilitar el acceso de todos los profesores interesados a diferentes cursos de capacitación, ya sea mediante el uso de franquicia Sence o gratuitamente, gracias a las 600 becas que se pusieron a disposición de quienes las requirieran.
De esta manera, la Facultad de Medicina dispuso 10 cursos para profesores, los cuales se imparten semanalmente desde el 4 de enero de 2010 y culminarán el 15 del mismo mes. “Ha habido mucho interés en participar, y las corporaciones municipales, así como los directores de colegios nos han pedido que éste sea un programa de perfeccionamiento permanente, con seguimiento durante el año, para que por ejemplo durante las vacaciones de invierno podamos evaluar de qué manera los docentes han incorporado sus nuevos conocimientos y herramientas en el aula”, añade la profesora Amaro.
Esta iniciativa cuenta, además, con una serie de actividades adicionales en materia cultural, posibilitando la asistencia de los inscritos a encuentros musicales, teatrales, cinematográficos y visitas a museos. En este marco, en nuestro plantel el 6 de enero se realizó una presentación del coro “Schola Cantorum”, el cual hizo un concierto vocal e instrumental. Del mismo modo, entre el 12 y 14 de enero, a las 16 horas, se efectuará un ciclo de cine en el Auditorio Juan Noé, y las películas programadas son “Cien niños esperando un tren”; “Los coristas” y Machuca”, respectivamente.
Asimismo, están programadas mesas redondas, conferencias y exposiciones internacionales. En este último ámbito, entre el 6 y 7 de enero se dictó el taller internacional de capacitación docente en Astronomía, iniciativa del Galileo Teacher Training Program (GTTP)/Global Hands-On Universe (GHOU), cuyas materias fueron impartidas por académicos de la Universidad de California, Berkeley y la Universidad de Chile. Este encuentro culminó con la conferencia “El Universo: puedo sentirlo en mis huesos”, que brindó el profesor José Maza, Premio Nacional de Ciencias Exactas y académico del Departamento de Astronomía de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Casa de Bello.
En el laboratorio en vez de la playa
En cuanto a la Escuela de Verano, que cada año y centralmente organiza la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, este 2010 contó con la participación de más de 600 estudiantes de enseñanza media de todo el país, informó la profesora Amaro. Todos ellos se inscribieron en los cursos que semanalmente impartirán académicos del ICBM hasta el 29 de enero, con clases teóricas y prácticas.
“Hay que destacar el esfuerzo y la entrega que han demostrado, tanto en los Cursos Bicentenario como en la Escuela de Verano, los investigadores y docentes del Instituto de Ciencias Biomédicas , quienes imparten las clases en ambos programas. De esta forma es como aportamos a mejorar la calidad de la enseñanza que ofrecen los profesores de nuestro país, y contribuimos a elevar la preparación y los conocimientos de los futuros estudiantes universitarios”, finaliza.
Invirtiendo en el futuro
Al finalizar la primera semana de la Escuela de Verano, los jóvenes se reunieron en el Aula Magna con la decana de la Facultad de Medicina, doctora Cecilia Sepúlveda, quien los felicitó por haber aprovechado sus vacaciones capacitándose: “Esta es una buena inversión que habla muy bien de ustedes, no sólo porque al venir al plantel asistieron a los cursos de su interés, sino porque también tuvieron la oportunidad de conocer y conversar con los académicos de la principal universidad estatal del país, que imparte ocho carreras de la salud, todas ellas acreditadas”, comentó.
La decana añadió que muchos de los jóvenes que asisten a la Escuela de Verano posteriormente ingresan a la facultad: “Creo que esta es una experiencia interesante y significativa para los escolares. Espero que el próximo año veamos a muchos de ustedes en el proceso de matrícula, tras rendir la PSU”, acotó.
Durante la reunión, el subdirector Académico, Marcelo Cano, realizó una presentación sobre la Universidad de Chile y, particularmente, respecto de las características de la facultad. |
“Se necesita que los profesores
se entretengan con la Astronomía”
Sergio Cabezón, representante en Chile del programa Galileo –una de las dos instituciones organizadoras del taller de astronomía-, jefe de comunicaciones y del área educación del Observatorio Radioastronómico Nacional, cuenta que a su institución le pareció muy interesante aliarse a la Universidad de Chile para realizar este curso porque “queríamos hacerlo desde el 2009 y, por distintos motivos, no pudimos hacerlo. Entonces, cuando nos enteramos a través de la UNESCO que la Casa de Bello estaba organizando este Programa Bicentenario, pensamos que era una buena oportunidad para concretar esta iniciativa y, de paso, cerrar de la mejor manera el Año Internacional de la Astronomía”.
Docentes de la Universidad de California impartieron este taller a profesores de enseñanza media chilenos. |
Dadas las carencias de nuestra educación pública, ¿la Astronomía es una prioridad?
Sí, para los escolares y más para los profesores, porque a partir de este año se empieza a implementar una gran modificación curricular desde quinto básico, por lo que habrá más cursos en los cuales se va a enseñar esta disciplina y con contenidos más profundos. Los profesores ya la enseñaban, pero no era algo tan extendido en la malla curricular.
Así, explica que su objetivo fue entregar herramientas tecnológicas a los docentes, que aprendieran a usar softwares gratuitos, cámaras digitales y telescopios robóticos que están disponibles en todo el mundo a través de internet, además de ahondar en temas teóricos, para refrescar y complementar sus conocimientos. Para ello, contaron con la activa participación de académicos de la Universidad de California, con experiencia de más de 20 años haciendo capacitaciones en todo el mundo, que lograron hacer de este taller algo dinámico y entretenido, “porque se necesita que los profesores se entretengan enseñando astronomía para que quieran aplicar estos conocimientos en el aula”. |
“Me ha servido para olvidar prejuicios”
Catalina Tapia, pasó a Tercero Medio en el Colegio Leonardo Da Vinci de Talagante, se inscribió en el primer grupo del curso de Genética de la Escuela de Verano, y se mostró muy satisfecha con su decisión porque “los contenidos se ven rápido, los profesores son bien claros en sus explicaciones, el material de apoyo es muy bueno, y lo que más me gustó es la parte práctica que se hace en el laboratorio, porque es más lúdico, entretenido, y como nos organizamos en grupos pequeños podemos interactuar más con los compañeros y los docentes”.
La doctora Lilian Jara junto a sus escolares en el curso de Genética. |
A ello, añade que pese a que son bastantes “las actividades se hacen sin problemas, porque conversamos pero no somos tan desordenados, porque a la Escuela de Verano se viene con una motivación distinta, pensamos que estamos “invirtiendo” nuestras vacaciones, por lo que somos más ordenados”.
Catalina quiere estudiar Medicina y luego especializarse en psiquiatría o “algo que tenga que ver con estudiar la conducta humana, el cerebro”. Reconoce que duda entre las universidades Católica y de Chile, “pero venir acá me sirvió mucho, porque igual tenía hartos prejuicios, pero he podido ver que acá está muy bien equipada y los profesores son muy buenos, además me gusta que haya más diversidad, se conocen distintas realidades”.
Por eso, finaliza señalando que la experiencia “es muy recomendable, porque se conoce a más gente de la misma onda de una”. |
Cecilia Valenzuela
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