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Nº 99 - 8 de julio de 2009
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PULSACIÓN SEMANAL
 
 

AsÍ lo dicen las enfermeras bolivianas que participaron de este diploma
“Vamos adelante, a empujar el carro”

  • Emocionadas y agradecidas culminaron el diploma “Docencia en partería” las 11 becarias bolivianas que, gracias a una iniciativa conjunta entre las universidades de Tarija, Sucre y Llallagua y la Escuela de Obstetricia y Puericultura de la Facultad de Medicina, permitió la preparación de estas profesionales para que ejerzan la enseñanza, en sus respectivos planteles, de la carrera de Enfermera Obstetriz.

Esta es una de las iniciativas de la Escuela de Obstetricia como Centro Colaborador de la OPS , que surgió con el financiamiento del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, como un proyecto cerrado y único mediante el cual se seleccionó a las postulantes, que desde el 2007, tuvieron clases teóricas y prácticas de cuatro diplomas, como son Atención Primaria, Neonatología, Obstetricia y Salud Sexual y Reproductiva, los cuales se desarrollaron mediante módulos tanto en Chile como en Bolivia.


Las graduadas se mostraron orgullosas y agradecidas por el apoyo recibido de parte de las docentes de la Escuela de Obstetricia y Puericultura.

La directora de esta escuela, profesora Hilda Bonilla, destacó los estrechos vínculos producidos entre estas profesionales y las académicas de su unidad, así como el modelo de atención en partería que les fue impartido, “mediante el cual ustedes serán formadoras de matronas en su país, en beneficio de sus mujeres y niños, contribuyendo a disminuir las tasas de morbimortalidad materna e infantil. Por ello, sus universidades tienen sus esperanzas puestas en ustedes, y les deseamos el mayor de los éxitos”.

La riqueza del intercambio


María del Carmen Belén Quisbert y la profesora Hilda Bonilla leen lo grabado en el galvano: "El mundo está en manos de aquellos que tienen el coraje de soñar y de correr el riesgo de cumplir sus sueños".

Roxana Silva, una de las diplomadas, dijo que “ésta fue la mejor de las vivencias, pues no esperaba poder adaptarme fácilmente, debido a las altas exigencias académicas, pero puedo decir que fuimos muy bien tratadas en la escuela y en los campos clínicos y, más que profesores, hoy son nuestros amigos”. Lo mismo fue corroborado por María Luisa Ramírez, quien señaló que tienen una gran responsabilidad por lo aprendido, “de lo cual seremos agentes multiplicadores en nuestra universidad”; a ello, añadió su agradecimiento por la generosidad y paciencia demostrado por las docentes, “mostrando un modelo de enseñanza ejemplar, pues fue muy personalizado. Con ello, vamos a ir adelante, empujando el carro”. Por último, Loida Vicentaciona destacó la estupenda colaboración mutua y el gran apoyo entregado por profesoras y matronas asistenciales en los campos clínicos, diciendo “es lo más bonito que he visto”.

Cerró el encuentro el doctor Ennio Vivaldi, vicedecano de la Facultad de Medicina, quien destacó como parte de la naturaleza de la Universidad de Chile su capacidad de generar y compartir conocimiento mediante políticas de intercambio y de colaboración, “pues entendemos la competencia como la capacidad de dar lo mejor de sí mismo para engrandecer la institución, y no como rivalidad o antagonismo; por ello es que esta interacción nos enriquece y perpetúa los valores de nuestro plantel”.

Cecilia Valenzuela